La Zakat no solo purifica nuestras riquezas, sino también nuestros corazones. Al cumplir con esta obligación, demostramos nuestra obediencia a Allah y nuestra solidaridad con los menos afortunados. Es un recordatorio constante de nuestra responsabilidad hacia los demás y una oportunidad para obtener la misericordia divina.

Con una red global de voluntarios y colaboradores, Islamic Relief se compromete a brindar ayuda de manera rápida y eficiente a aquellos en crisis. Además, la organización se adhiere a los más altos estándares de transparencia y rendición de cuentas, asegurando que cada donación se utilice de manera efectiva y responsable.

Nuestra compasión y generosidad pueden marcar la diferencia entre la desesperación y la esperanza. Cada donación, cada gesto de solidaridad, es una luz en la oscuridad para aquellos que más lo necesitan. Que nuestras lágrimas se conviertan en un catalizador para un cambio significativo en Palestina y en todo el mundo